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lunes, 30 de junio de 2014

Las enfermedades renales

 son procesos largos, muchas veces sin síntomas evidentes. Sepa cuáles son y cómo se diagnostican las enfermedades en los riñones.

Los riñones poseen en su interior alrededor de un millón de diminutas estructuras que se denominan nefrones. Son las que tienen como función filtrar la sangre y eliminar los productos de desecho y el exceso de agua que luego se transformará en orina. Esta se desplaza hacia la vegija por unos canales denominados uréteres
Algunas lesiones en los nefronas provocan una enfermedad renal y entonces los riñones no pueden eliminar los desechos. Normalmente, es un proceso de largo plazo y no hay síntomas evidentes que señalen que esto está ocurriendo
Principales enfermedades
Piedras en los riñones o cálculos renales
Los cálculos renales están compuestos por sales y minerales en la orina que se adhieren entre sí para formar pequeñas “piedritas”. Pueden ser tan pequeños como granos de arena o tan grandes como una nuez. Podrían quedarse en los riñones o salir del cuerpo a través del tracto urinario. El tracto urinario es el aparato del cuerpo que produce la orina y la transporta hacia afuera del cuerpo.
Insuficiencia renal o enfermedad crónica de los riñones
Cuando los riñones funcionan bien, limpian la sangre y eliminan los desechos, minerales y exceso de líquido. Además, producen las hormonas necesarias para mantener los huesos fuertes y la sangre sana. 
Pero si los riñones tienen alguna lesión, no pueden desempeñar estas funciones, entonces comienzan a acumularse desechos peligrosos para el organismo.
Se presenta un aumento de la presión arterial e insuficiente producción de glóbulos rojos: a esto se denomina enfermedad crónica de los riñones
Causas
Diabetes
Es importante que los riñones funcionen bien, dado que cumplen dos actividades muy importantes, como filtrar los desechos y mantener el equilibrio de las sustancias químicas de la sangre.
Con la diabetes, se deterioran los vasos sanguíneos del cuerpo y los riñones dejan de desempeñar estas funciones.
Cualquier clase de diabetes (tipo 1 o tipo 2) ocasiona una enfermedad en los riñones, de modo que quienes padecen de diabetes, deben realizar pruebas de sangre y de orina en forma periódica, para detectar una posible enfermedad renal.
Hipertensión
Es la segunda causa desencadenante de enfermedades en los riñones o insuficiencia renal. Tener la presión arterial elevada obliga al corazón a esforzarse más y esto, con el tiempo, daña todos los vasos sanguíneos, inclusive los que se encuentran en los riñones.
Síntomas
Es muy difícil que una persona perciba que tiene una enfermedad en los riñones, porque al comienzo, ésta no presenta síntomas. 
El daño se produce lentamente durante muchos años, incluso en décadas, y casi siempre afecta a los dos riñones al mismo tiempo.
En cambio, ante una enfermedad renal avanzada, puede suceder que
se sienta cansado, con problemas urinarios, que pierda el apetito, que tenga hinchazón y comezón en las manos y los pies y que sufra de calambres y falta de concentración
Diagnóstico y pruebas
3 pruebas sencillas para detectar la enfermedad renal:

Medición de la presión arterial.
Comprobación rápida de proteína o albúmina en la orina.
Cálculo de la tasa de filtración glomerular, con base en una medición de creatinina en suero. El nivel de creatinina muestra cómo están funcionando los riñones.
Otras pruebas de laboratorio
Imágenes de los riñones
Se pueden practicar imágenes por ultrasonido, tomografía computarizada o a través de resonancia magnética. Son pruebas efectivas para detectar crecimientos inusuales o bloqueos en el flujo de la orina.
Biopsia de riñón
Se realiza para examinar una parte de tejido del riñón con un microscopio. Para obtener esta muestra, se inserta una aguja a través de la piel, en la zona posterior del riñón. 
Qué puede hacer para controlar una ERC?
En la etapa inicial de una enfermedad de los riñones, se puede prevenir el avance con algunas medidas saludables
Controlar el nivel de glucosa en sangre.
Mantener la presión arterial en un nivel normal.
Tener una dieta baja en proteínas
Controlar el colesterol
Toman un inhibidor de enzima convertidora de angiotensina (ECA)
No fumar
Realizar ejercicios específicos para mantener o restaurar la función urinaria.
Cuando los riñones dejan de funcionar
Si los riñones dejan de funcionar por completo, el cuerpo se llena de agua en exceso y de productos de desecho, esto se denomina uremia. 
Si no es tratada, la uremia causará convulsiones y podría llevar a un estado de coma. 
Las soluciones son: realizar un tratamiento de diálisis o un trasplante de riñón.
Diálisis
El tratamiento de diálisis puede ser por hemodiálisis y diálisis peritoneal. La hemodiálisis utiliza un filtro especial llamado dializador, que funciona como un riñón artificial para depurar la sangre. 
El dializador es un recipiente cilíndrico que se conecta a la máquina de hemodiálisis. En el tratamiento, la sangre corre a través de unos tubos hasta el dializador, donde se filtran los desechos, el exceso de sal y el exceso de agua. Una vez que está limpia, la sangre fluye a través de otro conjunto de tubos y vuelve a ingresar al cuerpo. 

Trasplante de riñón
El paciente recibe un riñón donado de alguien que falleció o de un familiar cercano.
El riñón a trasplantar debe tener compatibilidad con el cuerpo del trasplantado, es muy importante para que sistema inmunitario no lo rechace. 
El sistema inmunitario podrá reaccionar ante el nuevo riñón, tomándolo como un extraño.
Una de las medidas que existen para que éste lo acepte, es tomar medicamentos especiales para engañar al sistema inmunitario.
Todo lo que debes saber sobre tu riñón
Los alimentos que te salvan
Cambiar el refresco por el agua sin duda, sería lo mejor que podrías hacer. Se recomienda beber muchos líquidos a menos que por la enfermedad renal no se pueda orinar poco. También se sugiere consumir el jugo de las frutas debido a que puede ayudar a limpiar los tejidos y la sangre.
Detectar
Detecta una enfermedad renal
Para evitar este tipo de desgracias, la Fundación Nacional del Riñón recomienda tres pruebas sencillas para detectar algún tipo de enfermedad renal: una medición de la presión arterial, una comprobación rápida de proteína o albúmina en la orina, y un cálculo de GFR.
Sustitutos del riñón
Cuando estos órganos dejan de funcionar, aún existen dos alternativas médicas: la diálisis, el cual funciona como un riñón artificial para depurar la sangre de una persona. La otra alternativa sería un trasplante de riñón, pero considerando los altos costos y la lista larga de espera, es un opción inalcanzable en algunos casos
Se puede vivir sin riñones?
Simplemente tu sangre se llenaría de toxinas y desechos y llegarían a tus demás órganos. No vivirías mucho tiempo y el poco que lo harías tendrías una calidad de vida mala, donde el dolor y las molestias serían tus fieles acompañantes. ¿No nos crees? En ese caso haz una visita a el departamento de diálisis de cualquier hospit
Cuidados especiales
De acuerdo con el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales cuando no se cuenta con un riñón se tiene que tener cuidado, en especial con los medicamentos como antibióticos, analgésicos y antiinflamatorios, ya que estos hacen daño al órgano
Puedo vivir con un riñón?
Para que puedas vivir para contar esta hazaña necesitas que tu otro órgano esté sano. El riñón restante suple la función del ausente, y para esto sufre de hipertrofia, esto quiere decir, que aumenta su tamaño para compensar el trabajo.
Por qué te duelen los riñones
Si te has hecho esa pregunta es porque entonces ya haz experimentado este tipo de dolor ingobernable. Si sientes molestias en el costado de la espalda seguido de fiebre, escalofríos, sangre en al orina y micción frecuente es probable que tengas cálculos renales, es decir, se ha formado un trozo de material dentro del riñón.
Enfermedades más comunes
La enfermedad renal crónica es una de ellas y se encarga de ir dañando poco a poco los nefrones. 
Otras afecciones de los riñones pueden incluir cáncer, quistes, piedras, así como otras infecciones.
Los refrescos, tus enemigos
Si quieres a tu organismo, en especial, tus riñones, demuéstrales tu amor y no consumas refrescos ya que un estudio hecho por investigadores de una universidad de Japón aplicado a más de 12.000 empleados reveló que beber refrescos azucarados aumentan el riesgo de tener una enfermedad renal.
Un millón de nefronas
Es lo que contiene cada riñón. Los nefronas, son muy importantes para el funcionamiento correcto del organismo, pues se encargan de filtrar la sangre eliminando los productos de desecho y el exceso de agua, que se transforman en orina
Tamaño y formas
Aunque hacen un trabajo sumamente complejo, no abarcan mucho espacio. Se trata de órganos en forma de frijol, cada uno más o menos del tamaño del puño de tu mano, ¿muy pequeños, no crees?
¿Qué hacen por ti?
Se trata de unas máquinas avanzadas de reprocesamiento. De hecho, cada día procesan 190 litros de sangre únicamente para eliminar 2 litros de productos de desecho y agua en exceso, para más tarde formar la orina. 
Por qué me enfermo del riñón
La mayoría de las enfermedades renales atacan a los nefronas, haciendo que pierdan su capacidad de filtración. Este daño puede ocurrir rápidamente o como consecuencia de una lesión o envenenamiento. Esto podría hacerse evidente después de años, o incluso al cabo de décadas

Urografía

La urografía es un examen radiográfico de contraste, que consiste en la realización de radiografías seriadas para ilustrar el paso de contraste previamente administrado por vía intravenosa. El contraste permite la exploración y el estudio de diversas secciones de las vías urinarias y detectar alteraciones en la secreción urinaria, desde el parénquima renal hasta la vejiga.

Se utiliza habitualmente como complemento del estudio urográfico cuando se sospecha que existen problemas en vías urinarias. Es una técnica mínimamente agresiva y contraindicada especialmente en pacientes sensibles a la acción farmacológica del contraste. Es conveniente que el paciente se encuentre en ayunas antes de la prueba y requiere un control hemodinámico durante la misma.
El estudio se basa en visualizar la excreción renal con el paso de los medios de contraste yodados que logran oscurecer la orina y, por tanto, hacer visibles las cavidades naturales de las vías urinarias: los conductos colectores del riñón, uréter y vejiga urinaria. La urografía permite la exploración morfológica y funcional de estos .

Morfología, ya que proporciona una imagen fiel de los riñones y de la vía excretora;
Funcional, ya que ofrece información precisa sobre la depuración de los riñones.
Después de inyectar un medio de contraste a base de yodo en la vena, la urografía permite ver y estudiar las diferentes secciones del transito de excreción de la orina: cálices y ampolla renales, los uréteres y la vejiga. De cada una de estas secciones se evaluará el tipo, la ubicación, el tamaño, el curso (en el caso de los uréteres) y la apriencia de las paredes tubulares. Además de estos hallazgos morfológicos, se pueden demostrar hallazgos funcionales, tales como apariencia, la durabilidad y la simetría de la eliminación, la intensidad y homogeneidad de la opacidad y la motilidad de las diversas secciones (la pelvis renal, uréteres y vejiga).

Todos estos datos permiten una evaluación precisa de la función renal y las diversas secciones de la excreción. La urografía es el examen de primera elección en todas las enfermedades de las vías urinarias, tales como:

Inflamación
Malformaciones
Hematuria
Cálculos
Cáncer
Traumatismo de vejiga, traumatismo de riñón, 
Preparación previa
Para poner de relieve las situaciones de riesgo, antes de un urograma se realizan los siguientes exámenes: electrocardiograma, azoemia, glicemia, creatinina, electroforesis proteica. Es importante asegurar claridad intestinal en la radiografía, obtenido en ayunas o con una dieta básica de alimentos sencillos los días antes del examen, con el uso de laxantes o con una evacuación al menos 8 horas antes del examen.

Precauciones previas
Aunque no es posible descartar o asegurar la probabilidad de que ocurra una reacción adversa,y aun, una fatalidad, se recomienda una serie de medidas para brindar mayor seguridad a los pacientes, estas son:

Identificación de grupos de riesgo:
La identificación de aquellas personas que tienen un riesgo mayor de que ocurra una reacción adversa al medio de contraste, deberá realizarse mediante un interrogatorio de sus antecedentes, prestando especial atención a reacciones previas a medicamentos, dejando constancia de su resultado. En todos los casos el paciente deberá brindar su consentimiento, luego en que ha sido informado en forma suficiente los riesgos y beneficios. Este paso debe ser documentado en un formulario de CONSENTIMIENTO INFORMADO.

Premedicacion y eleccion del medio de contraste:
Cuando se utiliza premedicacion, el esquema sugerido son corticoides, dos o tres dosis altas, iniciando su ingesta por lo menos 12 horas antes de la administración del contraste, y antihistaminico dentro de la hora previa del examen. En casos de urgencias o pacientes sin historia conocida, se recomienda una inyección de corticoide rapidoy antihistaminico.

Administración del medio de contraste:
El médico radiologo evalúa y considera para cada caso la correcta indicación, tipo y dosis a utilizar y es responsable del tratamiento indicado frente a la eventualidad de una reacción adversa
Las contraindicaciones de una urografía se limitan a: hiperazoemia elevada (uremia de 1 g/L o mayor),enfermedad cardíaca grave, alergia al yodo y mieloma múltiple. En casos de embarazo, la paciente debe consultar con su especialista obstétrico en busca de un mayor beneficio por la urografía que los riesgos del examen sobre el feto. El uso de medios de contraste yodatos ocasionalmente causa una reacción alérgica por la intolerancia a la base y puede producir náuseas, vómitos, prurito, sensación de malestar generalizado, erupción cutánea, tos, debilidad. La mayoría de los efectos adversos son casi siempre leves y se resuelven perfectamente con medidas terapéuticas.
Los medios de contraste utilizados son compuestos orgánicos a base de triodo, solubles en agua los que se inyectan por vía intravenosa o por infusión lenta. Después de la inyección de contraste se hacen radiografías seriados:

los primeros 2-3 minutos de la inyección: es la placa radiológica funcional de la urografía;
los siguientes 10-15 minutos, y 30-45 minutos de la infusión intravenosa, y más tarde en algunos casos: son las placas morfológicas de la urografía.
Una encuesta realizada correctamente debe permitir la exploración y el estudio de los riñones, cálices renales, uréteres y vejiga. Este último debe ser considerado cuando complete el llenado y, posteriormente, después de la micción del contraste. En la sospecha de la ptosis renal, debe ejecutarse una radiografía en posición vertical, lo que permite una documentación más precisa sobre la localización del riñón.

La urografía por infusión intravenos lenta está especialmente indicada en la pobreza de imágenes en la urografía estándar, y en casos de insuficiencia renal importante, incluso en cifras de urea en sangre superiores a los 2 g/L.
Rx Renal simple
Objetivos

Visualizar posibles alteraciones de las distintas partes del aparato urinario.

Indicaciones

Cálculo renal, próstata aumentada de volumen, tumores renales o vesicales, etc…

Realización

Requisitos y preparación

Tiene que tener una petición médica.
Su médico, que es quien conoce su historial, le prescribirá la prueba más adecuada según su sintomatología, indicándonos que es lo que quiere obtener de su radiografía.
No hace falta ninguna preparación previa.
No tiene ningún tipo de contraindicación, excepto en el caso de la mujer embarazada o que sospeche que lo pueda estar. En tal caso, siempre tendrá que comunicarlo antes de realizar la exploración.
Antes de hacer la radiografía, le harán quitar los objetos o la ropa que lleve en la zona a explorar y que dificulte la correcta realización del estudio.
Como se realiza

El técnico radiólogo le colocará en la posición más adecuada par obtener una buena imagen (generalmente boca arriba).

El paciente tendrá que mantener la posición y la respiración hasta que el técnico le avise que ya se puede mover y respirar.

Esta operación se realiza tanta veces como proyecciones haya pedido el  médico prescriptor.

Una vez hechas todas las radiografías, se le pedirá que espere hasta comprobar la calida de las imágenes.

Comentarios y recomendaciones

Las radiografías le serán entregadas o no, dependiendo de la especialidad el médico que le pide la prueba. Si el médico es de cabecera siempre hará falta un informe del medico radiólogo, mientras que si el médico es especialista de la zona radiografiada, el informe no es imprescindible.

En caso de requerir informe, se tendrá que volver a recoger el resultado.

Duración

5 minutos
Resultados

Entrega

2 días

Soporte

La persona que le hará la prueba es un técnico especialista en radiodiagnóstico. La radiografía pasará al médico especialista en radiodiagnóstico, que hará un informe médico detallado (si es necesario) donde hará constar todo lo que se ve en la radiografía.

Todo esto, junto con los estudios anteriores que usted haya aportado, le será entregado el día de la recogida.



Cáncer de endometrio

El cáncer de endometrio incluye un conjunto de variantes malignas que provienen del endometrio o revestimiento del útero. El cáncer endometrial es muy frecuente en países desarrollados; el tipo más común es el adenocarcinoma endometriode, que ocurre por lo general pocas décadas después del inicio de la menopausia y está asociado a una excesiva exposición al estrógeno. Con frecuencia el cáncer de endometrio se desarrolla en la forma de una hiperplasia endometrial, presentándose principalmente con sangrado vaginal. El carcinoma de endometrio es una causa común de muerte debido a un cáncer ginecológico, generalmente por detrás del cáncer de ovario y el cáncer cervical. El abordaje terapéutico más frecuente es la remoción quirúrgica del útero —histerectomía abdominal total— y sus anexos —salpingooforectomía bilateral—, que incluye ovarios y las trompas de Falopio.

Debido a que se puede desarrollar cáncer en otras porciones del útero además del endometrio, el término "cáncer de útero" no es apropiado para referirse exclusivamente al cáncer de endometrio
Epidemiología
El cáncer de endometrio ocurre tanto en mujeres premenopáusicas (25%), como en mujeres post-menopáusicas (75%). La edad afectada más comúnmente está entre los 50 y los 59 años, y es raro ver casos en mujeres menores de 40 años.1 La mayoría de los tumores (75%) se detectan en estadios tempranos (I-II), por lo que el pronóstico y la morbilidad están en declive.2 3

La incidencia de cáncer endometrial en mujeres está entre 15-25/100.000.2 La incidencia tiene un pico entre las edades de 60 y 70 años, pero entre el 2% y 5% de los casos pueden ocurrir antes de los 40 años de edad. Un riesgo mayor de la aparición de cáncer de endometrio ha sido notado en mujeres con niveles elevados de estrógeno natural.4

Una hiperplasia atípica y compleja conlleva un riesgo cercano al 30% de contraer cáncer de endometrio, mientras que una hiperplasia simple y no compleja tiene un riesgo tan solo del 2-3%. A pesar de que el fumar cigarrillos aumenta el riesgo de muerte temprana, las mujeres que fuman un paquete de cigarrillos al día tienen un menor riesgo de contraer cáncer de útero
Etiología
La mayoría de las mujeres con cáncer endometrial tienen una historia de niveles elevados de estrógenos sin oposición.6 Una de las funciones normales del estrógeno es estimular el crecimiento del revestimiento endometrial. Un exceso de la actividad de estrógeno, en especial acompañado de insuficientes niveles del opositor natural del estrógeno, la progesterona, puede producir hiperplasia endometrial, que es un precursor de cáncer.

Una elevación de los niveles de estrógeno puede ser debido a:

Obesidad,3 4 en especial >15 Kg de sobrepeso;
Estrógeno exógeno (medicamentos)
Otras condiciones asociadas al cáncer de endometrio incluyen:

Hipertensión arterial7
Síndrome del ovario poliquístico
Se ha notado un mayor riesgo en los siguientes casos:

Mujeres nulíparas; es decir, que nunca han llegado a un embarazo;5
Infertilidad o la incapacidad de quedar embarazada;
Menarquia precoz, comienzo de la menstruación a una muy temprana edad;
Menopausia tardía, la cesación de la menstruación a una muy tardía edad.1
Se ha notado que las mujeres con un historial de pólipos endometriales u otros crecimientos benignos del revestimiento uterino, así como mujeres post-menopáusicas que usan terapia de reemplazo de hormonas estrogénicas —especialmente si no toman conjuntamente la progestina periódica7 — y mujeres con diabetes,5 tienen un riesgo mayor de contraer cáncer del endometrio.

El medicamento tamoxifeno, usado para el tratamiento del cáncer de mama, puede también aumentar el riesgo de cáncer endometrial.
Clasificación
La mayoría de los tipos de cáncer de endometrio son carcinomas —por lo general (95%) adenocarcinomas—, queriendo decir que se originan de la capa única de células del epitelio que reviste al endometrio, así como también de las glándulas endometriales.9 Existen varios subtipos histopatológicos del carcinoma endometrial, incluyendo la forma común tipo endometrioide, en la que las células cancerígenas crecen en patrones similares al endometrio normal, así como las formas más agresivas tipo seroso papilar y células claras. Algunas fuentes han propuesto que los carcinomas de endometrio sean clasificados en dos grupos patogénicos:10

Tipo I: Este tipo de cáncer ocurre con más frecuencia en mujeres en las etapas pre- y peri-menopáusicas, usualmente con una historia de exposición de estrógeno sin oposición y/o hiperplasia de endometrio. A menudo son mínimamente invasivas en las profundidades del endometrio, y tienen estadificación endometrioide baja, por lo que presentan un buen pronóstico.
Tipo II: Son cánceres que ocurren en mujeres en su vejez post-menopáusica, muy comunes en afroamericanas y no tienden a estar asociadas a la exposición de estrógenos. Típicamente tienen una estadificación endometrioide elevada, son papiloserosos o de tipo células claras y presentan un pronóstico pobre.
En contraste a los carcinomas endometriales, el menos frecuente sarcoma del estroma endometrial es un tipo de cáncer que se origina en el tejido conjuntivo no glandular del endometrio. El carcinosarcoma uterino, antes llamado tumor muleriano mixto maligno, es un cáncer uterino raro que contienen células cancerosas tanto del tipo glandular como las de apariencia sarcomatosas —en este caso el origen de las células es desconocido.
Cuadro clínico
Sangrado uterino anormal, períodos menstruales anormales;
Sangrado entre los períodos normales en mujeres pre-menopáusicas;
Sangrado vaginal y/o manchado en mujeres post-menopáusicas;1 en mujeres mayores de 40 años, episodios extremadamente largos, frecuentes y voluminosos de sangrado pueden indicar cambios malignos;
Anemia, causada por la pérdida crónica de sangre, en especial si la paciente ha ignorado los síntomas de un sangrado menstrual prolongado o anormalmente frecuente
Dolor abdominal bajo o calambres intra-pélvicos6
Dolor durante las relaciones sexuales4
Flujo vaginal blanquecino o incoloro en mujeres post-menopáusicas
Diagnóstico
Evaluación clínica
Los chequeos de rutina en mujeres asintomáticas no está indicado, por razón de que la enfermedad es curable desde sus estadios iniciales. Los resultados de un examen pélvico por lo general salen normales, especialmente temprano en la enfermedad. Los cambios de tamaño, forma o consistencia del útero y/o sus alrededores y estructuras de soporte pueden ocurrir cuando la enfermedad está en estadios más avanzados.

Una prueba de Papanicolaou puede verse normal o,6 en ocasiones, mostrar cambios celulares anormales;
El legrado endometrial es el método diagnóstico tradicional. Tanto la muestra del endometrio como endocervical debe ser estudiado;
Si legrado endometrial no produce suficiente material de diagnóstico, una dilatación y legrado(D & L) sería necesaria para diagnosticar el cáncer.
Una biopsia endometrial o una biopsia por aspiración puede ayudar en el diagnóstico;
El ultrasonido transvaginal para evaluar el grosor del endometrio en mujeres post-menopáusicas que estén sangrado se ha estado usado con mayor frecuencia para evaluar el cáncer de endometrio;1
Recientemente, se ha presentado un nuevo método de examinación llamado el TruTest, el cual usa un pequeño cepillo que rastrea el revestimiento completo del útero. Este método resulta menos doloroso que la biopsia y tiene una mayor probabilidad de procurar suficiente tejido para hacer el examen. Por razón de que es un procedimiento más sencillo y menos invasivo, el TruTest puede ser realizado con la misma frecuencia y conjuntamente con un Papanicolaou, permitiendo así una temprana detección y tratamiento.
Antatomía patológica
La histopatología del cáncer endometrial es altamente diversa. El hallazgo más común es el adenocarcinoma endometrial bien diferenciado, el cual está compuesto por numerosas glándulas pequeñas, congestionadas con variados grados de atipia nuclear, actividad mitótica y estratificación. A menudo está situado en un fondo de hiperplasia endometrial. Los francos adenocarcinomas pueden distinguirse de la hiperplasia endometrial por el hallazgo de una clara invasión del estroma o por glándulas muy juntas (espalda-a-espalda) los cuales representan el reemplazo no destructivo del estroma endometrial por el cáncer. Con la progresión de la enfermedad, el miometrio llega a ser infiltrado
Evaluación adicional
Las pacientes con un recientemente diagnosticado cáncer de endometrio, por lo general no proceden con estudios de radiología, tales como TAC, para evaluar el grado extensión de la enfermedad, puesto que los resultados no son productivos. Una evaluación pre-operativa idealmente incluye un historial médico completo y un examen físico, una evaluación pélvica, un examen rectal con sangre oculta, rayos X tórax, hematología completa y química sanguínea, incluyendo función hepática. Se recomienda una colonoscopia si la sangre oculta de heces resulta positiva o si la paciente tiene síntomas, debido a los factores etiológicos comunes tanto del cáncer de endometrio y el cáncer de colon. Ocasionalmente se evalúa el marcador tumoral CA-125, puesto que puede predecir los estadios avanzados de la enfermedad
Estadificación
El carcinoma endometrial se examina quirúrgicamente usando el sistema de estadios de la Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia:6

Estadio IA: el tumor está limitado al endometrio
Estadio IB: invasión de menos de la mitad del miometrio
Estadio IC: invasión de más de la mitad del miometrio
Estadio IIA: está involucrado el endocervix solo hasta la capa glandular
Estadio IIB: estroma cervical está comprometido
Estadio IIIA: el tumor invade la membrana serosa o anexos, o se consigue una citología peritoneal maligna
Estadio IIIB: metástasis vaginal
Estadio IIIC: metástasis hacia la pelvis o los ganglios linfáticos para-aórticos
Estadio IVA: invasión de la vejiga urinaria o el aparato digestivo
Estadio IVB: metastasis distante, incluyendo los ganglios linfáticos intra-abdominales o inguinales
Tratamiento
El tratamiento primario es quirúrgico, que consiste en, al menos un muestreo citológico del fluido peritoneal, exploración abdominal, palpación y biopsia de algún nódulo linfático, histerectomía abdominal y remoción de ambos ovarios y trompas de Falopio (denominado salpingoooforectomía).1 La linfadenectomía o el remover los nódulos linfáticos pélvicos y para-aórticos, se realiza a veces para tumores que tiene características de alto riesgo, tales como un tumor patológico seroso o de células claras grado III, la invasión de más de la mitad del miometrio o la extensión hacia la cérvix o anexos. A menudo, puede ser indicado el remover el omento.

Se prefiere la histerectomía abdominal por encima de la vaginal, porque permite al examinador evaluar y obtener lavados de la cavidad abdominal y detectar así mayor evidencia del cáncer.

Las mujeres con el estadio 1 de la enfermedad están a un aumentado riesgo de recurrencia, y las pacientes en el grado 2 se les ofrece a menudo la combinación quirúrgica con terapia de radiación. La quimioterapia puede ser considerada en algunos casos, especialmente en estadios 3 y 4 de la enfermedad. La terapia de reemplazo hormonal con progestinas y antiestrógenos ha sido usada para el tratamiento de sarcomas del estroma endometria

Cáncer de pene

El cáncer de pene es un tipo de tumor maligno que tiene una incidencia baja en los países desarrollados, pues se produce con una frecuencia inferior a un caso por cada 100.000 habitantes y año. En Estados Unidos se realizan alrededor de 1500 diagnósticos nuevos al año. Sin embargo, el número de casos es mucho mayor en las regiones poco desarrolladas, representado en algunos países africanos como Uganda hasta el 10% de los tumores malignos que se presentan en el varón. La edad media de aparición es 65 años.
Causas
Se desconoce la causa exacta que origina la enfermedad. Parece ser que existe una asociación entre la infección por el virus del papiloma humano y el cáncer de pene. También se ha comprobado que es muy raro antes de los 50 años, 4 de cada 5 casos se producen en varones cuya edad supera los 55.
Síntomas
Dado que este tumor aparece frecuentemente en la parte distal del pene o glande, que en algunos hombres está permanentemente cubierta por la piel del prepucio, es recomendable bajar periódicamente el prepucio para examinar la piel que se encuentra debajo del mismo. Los síntomas más frecuentes son:

Lesión parecida a una verruga o protuberancia que aumenta progresivamente de tamaño en el curso de semanas o meses.
Úlcera o llaga que no se cura por si misma o vuelve a aparecer.
Erupción de color rojo localizada en una porción del pene.
A veces secreción persistente por debajo del prepucio.
Aunque estos síntomas pueden corresponder a diferentes procesos, muchas veces de carácter benigno, es conveniente consultar al médico para llegar a un diagnóstico exacto
Diagnóstico
Se manifiesta como una lesión que aparece en el glande o prepucio en más del 80% de las ocasiones y en el cuerpo del pene en el resto.

El diagnóstico 
 se realiza practicando una biopsia de la lesión sospechosa. La muestra debe analizarse en un laboratorio de Anatomía Patológica. El tipo de tumor más habitual es el carcinoma epidermoide que puede adoptar distintas formas, como la superficial, infiltrante o ulcerovegetante
Clasificación 
Se utiliza para describir el grado de extensión de la enfermedad según un sistema de claves. El grado más bajo o ausencia de tumor correspondería a T0N0M0 y la máxima extensión a T4N3M1. A continuación se realiza un resumen de los principales grados.
T - Tumor primario:


Diagrama anatómico de un pene: Corpus cavernosum = Cuerpo cavernoso, Corpus spongiosum = Cuerpo esponjoso, Glas penis = Glande, Dorsal artery = Arteria dorsal del pene, Internal pudic artery = Arteria pudenda interna, Bulbo-Urethral artery = Arteria del bulbo del pene
T0. No existe tumor primario.
Tis. Carcinoma in situ.
T1. Invasión del tejido conjuntivo subepitelial (por debajo de la piel).
T2. Invasión del cuerpo esponjoso o del cuerpo cavernoso del pene.
T3. Invasión de la uretra.
T4. Invasión de otras estructuras próximas.
N - Ganglios linfáticos regionales[editar]
N0. No existen ganglios linfáticos inguinales.
N1. Ganglio linfático inguinal en un solo lado móvil y palpable.
N2. Ganglios linfáticos inguinales múltiples móviles palpables.
N3. Masa ganglionar de gran tamaño en región inguinal.
M - Metástasis[editar]
M0. No existen metástasis a distancia del tumor principal.
M1. Si existen metástasis a distancia del tumor principal.
Tratamiento
El tratamiento consiste en la extirpación de la lesión con márgenes amplios, mediante cirugía o la aplicación de láser, técnica recomendada cuando el tumor es menor de 2 cm y no infiltra el órgano en profundidad.

En general se pretende conservar el órgano en la mayor amplitud posible, siempre que ello no comprometa la vida del paciente. Puede ocurrir que una extirpación demasiado conservadora para intentar mantener el órgano, tenga como consecuencia la no eliminación completa de la lesión maligna lo que conlleva la posibilidad de que produzca metástasis que invadan otras zonas del organismo.

Cuando es posible se practica una glandectomía en la que únicamente se secciona el glande en mayor o menor extensión. En otros casos es preciso realizar una penectomía total o subtotal.

Otra posibilidad de tratamiento es la radioterapia externa que está recomendada en tumores pequeños y no infiltrantes de menos de 4 cm de diámetro.

También se emplea la quimioterapia, bien como coadyuvante a las técnicas citadas anteriormente, o como tratamiento único en el caso de que la extensión del tumor no haga posible la cirugía.1 2 3


Cáncer de testículo

El cáncer de testículo es un tipo de cáncer que generalmente se origina en el testículo, una parte del sistema reproductor masculino, aunque también se puede manifestar inicialmente en el abdomen o en el tórax (mediastino). Su causa es hasta el momento desconocida. Es una enfermedad que ha pasado de ser extremadamente rara a principios del siglo XX, a ser en la actualidad el tipo de tumor maligno más común entre los varones jóvenes. Son diagnosticados cada año con esta enfermedad, entre 8.000 y 9.000 varones en Estados Unidos, 1.400 en el Reino Unido, unos 500 en España y sobre 10.000 en la Unión Europea. A lo largo de la vida, la probabilidad de desarrollar cáncer de testículo es de 1 entre 250 (0,4%), aunque la incidencia varía en función de las razas. La mayor incidencia se da entre los varones de raza blanca de parte del norte de Europa. En la Unión Europea la menor incidencia se presenta en España. Los varones de raza negra tienen la menor incidencia global. Es más común entre los 15 y 40 años aunque puede afectar a varones de cualquier edad. El cáncer de testículo tiene una de las tasas de curación más altas de todos los tipos de cáncer, por encima del 90%, y prácticamente del 100% si no se ha extendido. Incluso en los relativamente pocos casos en los que se ha extendido ampliamente, la quimioterapia consigue curar completamente al menos a la mitad de esos casos.
Síntomas y detección precoz del cáncer
La gran mayoría de los casos de cáncer de testículo es detectado por el propio paciente. No produce síntomas generales que puedan hacer sospechar de un problema médico, como fiebre o dolor. Dado que el cáncer de testículo es curable cuando se detecta precozmente, los expertos recomiendan la realización mensual de la autoexploración testicular tras una ducha caliente, cuando el escroto está más relajado. El varón debe examinar suavemente cada testículo palpando en busca de bultos duros y luego comparar ambos.

Los síntomas incluyen:

Un pequeño bulto fijo en el propio testículo, generalmente indoloro
pequeño dolor o pesadez en un testículo (sin haber recibido ningún golpe reciente)
una repentina acumulación de fluido en el escroto
Ligero agrandamiento o molestias en los pezones o en los pechos
dolor sordo en el bajo vientre o la ingle
aumento o disminución significativos del tamaño de un testículo
Cualquiera de esos síntomas debería ser consultado con el médico de familia, el cual valorará la importancia de los síntomas e indicará si es preciso realizar estudios complementarios o si es necesario acudir al urólogo u otro especialista.

El cáncer de testículo es uno de los más curables de todos si se detecta pronto.

El diagnóstico del cáncer de testículo se realiza mediante ultrasonidos con una ecografía de los testículos, y si lo hay, su extensión por rayos X y TAC. En caso de un diagnóstico dudoso, la ecografía debería ser realizada antes de 2 semanas. Además en un análisis de sangre se miden los marcadores tumorales específicos AFP, GCH-β, (y LDH) que proporcionan mayor evidencia sobre el tipo de tumor y su extensión.

La biopsia o PAF del testículo está contraindicada en general, puesto que puede facilitar la dispersión del tumor por una ruta que no es la usual. Y está indicada en pacientes con tumores retroperitoneales o mediastinales
Factores de riesgo
Cáncer previo en el otro testículo
Edad (entre los 13 y 50 años)
Criptorquidia (testiculo no descendido, aumenta hasta en 14 veces el riesgo)
Raza blanca, en el norte de Europa
Hermano que haya tenido cáncer de testículo
Ejercicio físico intenso.
Falta de oxígeno en el cuerpo.
Subfertilidad
Patología
El cáncer de testículo puede desarrollarse a partir de cualquier tipo de célula de las presentes en el testículo, pero más del 95% de todos los cánceres de testículo son de células germinales. (Las células germinales producen los espermatozoides; en sí mismas no son patogénicas). En general, aquí nos referiremos al cáncer de testículo de células germinales. La histopatología del cáncer de testículo es complicada, y debería ser hecha por un patólogo experimentado que especifique características tales como, invasión vascular (en los noseminomas), de la rete testis (en los seminomas), o el porcentaje de los distintos tipos de tumor si los hubiere.
Clasificación
Los tumores de células germinales se distinguen entre seminomas y noseminomas (En el Reino Unido los noseminomas los denominan genéricamente teratomas, mientras que en EE.UU. usan la palabra teratoma para otro tipo).

Los seminoma son tumores de células germinales inmaduras de crecimiento lento y representan alrededor del 50% de los casos, de los cuales el 75% son de estadio 1. Los seminomas tienden a estar confinados al testículo puesto que se propagan relativamente despacio, y a través del sistema linfático. Suelen ser los más habituales entre el segmento de pacientes de mayor edad.

Los noseminoma, por el contrario, son células germinales más maduras que se propagan con mayor rapidez. Los noseminomas engloban varias subclases; sus tasas de expansión varian algo pero se tratan de forma similar. Suelen ser los más habituales entre el segmento de pacientes de menor edad.

Carcinoma embrionario, es es tipo más común, aunque normalmente aparece junto con otros tipos.
Tumor de saco vitelino, es el tipo más común en los niños, en los que se cura con mucha más facilidad que en los adultos.
Coriocarcinoma, es un tipo muy poco frecuente (1%). Dado su diseminación hematogena es agresivo y altamente mortal.
Teratoma inmaduro
Teratoma maduro, son células adultas premalignas que rara vez se extienden, pero que pueden transformarse en otro tipo.
Cuando ambos, seminomas y noseminomas están presentes en un tumor (lo cual no es raro), el tumor se clasifica como noseminoma y se trata como tal.

La anatomía patológica del seminoma se confunde con relativa facilidad con la del carcinoma embrionario. En caso de recibir tratamiento de radioterapia, se debe asegurar que realmente no ha habido confusión, puesto que el carcinoma embrionario es un noseminoma que no es sensible a la radiación y sería un tratamiento inútil
Marcadores
El cáncer de testículo es uno de los pocos tumores que producen marcadores tumorales específicos, que se pueden usar para seguir su evolución, y la efectividad del tratamiento. Para ello, antes de la cirugía, se deben determinar los niveles de los marcadores para establecer la referencia inicial.

La AFP aparece en mayor o menor cantidad en todos los tumores germinales noseminoma, excepto el coriocarcinoma, pero nunca se produce en el seminoma puro. (No obstante, la ausencia de AFP no indica que un determinado tumor sea un seminoma. Debe incluirse también en el seguimiento de los seminomas).
La GCH-β que no está presente en los varones normales, es producida por los tumores noseminoma y también en muchos casos de seminoma.
La LDH no es un marcador específico, pero en combinación con los anteriores puede dar una idea de la extensión de la enfermedad. En los casos de seminoma que se presentan sin elevación de la GCH-β, puede resultar especialmente útil.
La ausencia de marcadores tumorales no excluye la posibilidad de padecer un tumor de células germinales.
Un caso de cáncer de testículo se categoriza como perteneciente a uno de tres estadios (que tienen subclasificaciones).

Estadio 0, CIS (carcinoma in situ) es una lesión preinvasiva previa a los tumores.
Estadio 1, el cáncer está sólo presente en el testículo.
Estadio 2, el cáncer se ha extendido a los ganglios linfáticos abdominales (pequeñas estructuras como un garbanzo que producen y almacenan las células que combaten las infecciones).
Estadio 3, el cáncer se ha extendido a otros lugares incluyendo los riñones, hígado, huesos, pulmones o cerebro.
La mayoría de los casos cuando se detectan son de estadio 1; el estadio 3 es relativamente raro.

La propagación de las metástasis de cáncer de testículo tiene una progresión bien definida. Los ganglios paraaórticos (situados alrededor de la aorta y vena cava inferior a la altura de los riñones) son el primer lugar en el que se producen las metástasis. El escroto no comparte el sistema linfático de los testículos, ya que estos descienden desde el abdomen durante la gestación hasta su posición normal. Por ello se realiza una orquidectomía inguinal, evitando la alteración del sistema linfático y en lo posible la difusión de células tumorales a otras zonas donde no se sospeche que pueden aparecer. En los tumores de células germinales noseminomas, la propagación es hematológica y por ello el lugar más probable de una metástasis son los pulmones, hígado y cerebro..
TratamieLos tipos básicos de tratamiento son: cirugía, radioterapia, quimioterapia y observación o una combinación de ellos. El tratamiento más adecuado estará en función del tipo de tumor, y su pronóstico.

Cirugía
La mayoría de las veces, la orquiectomía inguinal radical (extirpación del testículo y demás estructuras asociadas a través de una pequeña incisión en el abdomen) es suficiente para la curación completa del paciente. Es una operación sencilla y rápida que se hace con anestesia raquídea, y el paciente puede volver a su casa enseguida, o incluso el mismo día. Aunque sería posible en muchos casos quitar el tumor de un testículo dejándolo funcional, es algo que rara vez se hace por el riesgo de dejar algunas células del tumor, y se realiza la orquiectomía inguinal radical. Dado que es un órgano par, y un solo testículo es suficiente para la fertilidad, producción hormonal y otras funciones masculinas, la excepción sería sólo en el caso de que fuese el único testículo y sólo si la operación la realiza un experto. El 80% de los pacientes están curados sólo con la cirugía, y tras ella hay que valorar las posibles opciones de tratamiento en función del riesgo particular basado fundamentalmente en el análisis patológico, los marcadores tumorales y la evidencia radiográfica. Para ello, tras la extirpación, el testículo es fijado con solución de Bouin1 2 porque así conserva mejor algunos detalles morfológicos como la conformación nuclear. Una vez fijado está listo para que el tumor sea clasificado por el patólogo.

En el caso de los noseminomas que parecen ser de estadio 1, a menudo se realiza en una operación aparte una linfodectomía de los ganglios retroperitoneales para determinar si el cáncer era en realidad de estadio 2. Sin embargo, esto que es estándar en muchos sitios, también es omitido en muchos otros por el riesgo significativo de dañar determinados nervios al tratarse de una operación mayor que requiere de una gran experiencia, y que puede resultar en eyaculación retrógrada e infertilidad.

La cirugía se puede realizar en otras partes del cuerpo donde (en casos raros) haya tumores y esto sea apropiado; puede ser antes o después de la quimioterapia o radioterapia, aunque con posterioridad a dichos tratamientos es una cirugía mucho más complicada y debe ser llevada a cabo por especialistas
Radioterapia
La radioterapia mediante rayos X de alta energía es efectiva en los seminomas, pero no en los noseminomas. Se puede administrar para tratar seminomas de estadio 2, o como terapia preventiva en el caso de cáncer en estadio 1, y así minimizar la probabilidad de que aún existan tumores minúsculos indetectables y que pudiesen extenderse. La extraordinaria sensibilidad a la radioterapia de los seminomas hace que la tasa de curación para los casos en estadio 1 sea superior al 95%. Incluso la tasa de supervivencia no es significativamente menor para los casos de estadio 2 con tumores pequeños (<2cm) tratados con radioterapia. Las dosis de radiación usados para el tratamiento del seminoma son relativamente pequeñas, y aunque los efectos secundarios no son despreciables, no son tan importantes como los producidos por la quimioterapia. Como tratamiento preventivo en estadio 1 se suelen usar 20-25Gy, y para el estadio 2 se aumenta a 30-35Gy localizado sobre los tumores. La dosis total se reparte en varias sesiones de entre 1,5-2Gy a lo largo de varias semanas.
Quimioterapia
La quimioterapia es el tratamiento estándar, con o sin radiación, cuando el cáncer se ha extendido a otras partes del cuerpo (o sea, estadio 2 ó 3). En algunos sitios se ofrece como opción para los seminomas en estadio 1 como terapia preventiva en los casos de mayor riesgo. La introducción de la terapia con cisplatino como agente antitumoral supuso una revolución espectacular en la tasa de curación de este tipo de cáncer. Los agentes primarios son el cisplatino, etóposido y bleomicina. Los fármacos antitumorales causan efectos secundarios importantes, tanto agudos (vómitos, náuseas, caída del pelo, cansancio, neutropenia, sépsis, azooespermia), como a largo plazo (ototoxicidad, neuropatía periférica, tumores secundarios, problemas cardiovasculares).

Aunque el éxito del tratamiento depende del estadio, la tasa media de supervivencia (a cinco años) es de alrededor del 95%, y para los casos de cánceres en estadio 1 (si son vigilados adecuadamente) es de prácticamente el 100% de supervivencia. Por eso es de suma importancia la acción inmediata cuando existe la posibilidad de padecer cáncer de testículo.
Acciones tras el tratamiento
Para cánceres de estadio 1 que no han tenido ninguna terapia preventiva, la observación durante al menos 3 a 10 años es crucial (análisis de sangre, TAC y radiografías) para evaluar si el cáncer se ha extendido a otras partes del cuerpo (metástasis). Para otros estadios y cuando se ha dado radioterapia o quimioterapia, la vigilancia dependerá de las circunstancias, pero normalmente debería realizarse durante un periodo de 5 años (con intensidad decreciente). En el caso de los seminomas, hay que considerar algún tipo de observación de por vida, pues se han dado algunos casos raros con recurrencias decenas de años después, aunque tras cinco años la tasa de recaída es de menos del 5% de los casos.

CÁNCER DE CUELLO DE ÚTERO

El cérvix es la parte inferior del útero o matriz y se conoce comúnmente como cuello de la matriz. El cérvix tiene un papel muy importante en el mantenimiento de un embarazo normal. El cáncer de cérvix constituye el 6 por ciento de los tumores malignos en mujeres, el segundo más frecuente entre todas las mujeres y el más frecuente entre las mujeres más jóvenes. En general afecta a mujeres entre 35 y 55 años. Este tipo de cáncer puede estar ocasionado por un virus (el papilomavirus humano) que se contagia a través de las relaciones sexuales.

CAUSAS
Existen algunos factores que se han relacionado con la incidencia del cáncer de cérvix. El factor de riesgo más importante en el desarrollo de lesiones premalignas (CIN) o cáncer de cérvix es la infección por papilomavirus, especialmente los tipos 16 y 18. Otros factores son:

El consumo de tabaco.
La promiscuidad sexual.
Edad precoz de inicio de relaciones sexuales.
Número de hijos elevado.
Bajo nivel socioeconómico.
Menopausia después de los 52 años.
Elevada presión arterial.
Exposición a elevados niveles de estrógenos.
Por ello, se recomienda habitualmente la realización del test de Papanicolaou cuando la mujer comienza a mantener relaciones sexuales, de manera anual en mujeres de alto riesgo y en mujeres de bajo riesgo, después de 2-3 revisiones normales, se pueden realizar cada 3 años.

SÍNTOMAS DE CÁNCER DE CUELLO DE ÚTERO
Los programas de detección precoz permiten diagnosticarlo en mujeres asintomáticas. Habitualmente el primer síntoma de cáncer de cérvix es el sangrado postcoital o entre dos menstruaciones. También puede ir acompañado de un aumento en las secreciones vaginales, que se hacen malolientes.

Es posible que la mujer no tenga ningún dolor ni síntoma hasta las últimas fases de la enfermedad, pero las Pap realizadas sistemáticamente pueden detectar el cáncer cervical de forma precoz. El cáncer cervical comienza con cambios lentos y progresivos en las células normales y tarda varios años en desarrollarse. Estos cambios progresivos se observan al microscopio colocando las células extraídas mediante la técnica Pap sobre un portaobjetos. Los patólogos han descrito estos cambios en distintos estadios que van desde la normalidad hasta el cáncer invasivo.
PREVENCIÓN
Existen dos vacunas que previenen el cáncer de cuello de útero así como otras enfermedades causadas por el virus del papiloma humano (VPH).

La primera, Gardasil, del laboratorio Sanofi Pasteur MSD, fue comercializada en España en el año 2007, y la segunda, Cervarix, de GlaxoSmithKline (GSK), está en las farmacias desde principios de 2008.

Gardasil previene la aparición de displasias cervicales de alto grado, carcinomas cervicales, lesiones displásicas vulvares y vaginales de alto grado y verrugas genitales causadas por los tipos de VPH 6, 11, 16 y 18. Estos dos últimos tipos de VPH causan el 70 por ciento de las muertes por este tumor. Esta vacuna se dirige a niñas y mujeres de entre 9 y 26 años, siendo cien por cien eficaz en aquellas que no hayan mantenido relaciones sexuales y que, por lo tanto, no hayan estado expuestas al virus. La Agencia Europea de Medicamentos (EMEA) estableció que su uso estaba contraindicado en el caso de pacientes con síndrome coronario agudo, como angina u otros tipos de infarto de miocardio. Tampoco está recomendado en personas con enfermedad cardiaca isquémica y/o enfermedad periférica arterial, y su combinación con insulina debe darse sólo en casos excepcionales. Se compone de tres inyecciones.

Cervarix, está igualmente indicada para la prevención de las lesiones premalignas del cuello de útero y del cáncer de cérvix, relacionados causalmente con los tipos 16 y 18 de VPH y ofrece además protección cruzada frente a los tipos 31, 33 y 45. Induce niveles de anticuerpos en un orden de magnitud mayor que los encontrados tras una infección natural en mujeres de hasta 55 años, aunque el nivel de anticuerpos en sangre es mayor en los intervalos de edad de entre 10 y 14 años. Entre sus particularidades, presenta un innovador sistema adyuvante AS04, que confiere gran potencia y duración a la inmunización. De hecho, es la única que ha demostrado que los anticuerpos presentes en la sangre pasan de forma eficaz también al cuello del útero. Consta, al igual que Gardasil, de tres dosis, adquiridas en la farmacia.

TIPOS DE CÁNCER DE CUELLO DE ÚTERO
Existen principalmente dos tipos de cáncer de cérvix: carcinoma escamoso en el 85 por ciento de los casos y adenocarcinoma en el 15 por ciento.

DIAGNÓSTICOS
La Pap puede detectar de forma exacta y poco costosa hasta un 90 por ciento de los cánceres cervicales, incluso antes de que aparezcan los síntomas. En consecuencia, el número de muertes por esta enfermedad se ha reducido en más del 50 por ciento. Es recomendable que las mujeres se hagan su primera Pap cuando comienzan a ser sexualmente activas o a partir de los 18 años y que lo repitan sucesivamente una vez al año. Si los resultados son normales durante 3 años consecutivos, entonces la prueba puede espaciarse y realizarla cada 2 o 3 años, siempre que no se cambie el hábito de vida. Si todas las mujeres se sometieran a la Pap de forma periódica, podrían eliminarse las muertes causadas por esta clase de cáncer. Sin embargo, casi el 40 por ciento de las mujeres de los países desarrollados no se hace la prueba regularmente.

Si se encuentra una masa, una úlcera u otra formación sospechosa sobre el cuello uterino durante una exploración pélvica, o si los resultados de las Pap indican una anomalía o cáncer, se debe realizar una biopsia (extracción de una muestra de tejido para examinarla al microscopio). La muestra de tejido se obtiene durante una colposcopia, en la que se usa un tubo de visualización con una lente de aumento (colposcopio) para examinar el cuello interno del útero minuciosamente y escoger el lugar idóneo de la biopsia. Se realizan dos clases de biopsia: la biopsia en sacabocados, en la que se extrae una diminuta porción del cuello uterino que se selecciona visualmente con el colposcopio, y el legrado endocervical, en el que se raspa el tejido del canal del cuello inaccesible visualmente. Ambos procedimientos son un poco dolorosos y producen una pequeña hemorragia, aunque juntos suelen proporcionar suficiente tejido para que el patólogo establezca un diagnóstico. Si éste no resulta claro, se realiza una conización, en la que se extrae una mayor porción de tejido. Por lo general, esta biopsia se realiza mediante escisión electroquirúrgica en la propia consulta del médico.

Una vez que se ha establecido el diagnóstico, se deben determinar el tamaño y la localización exacta del cáncer (es decir, se realiza un estadiaje). El proceso se inicia con una exploración física de la pelvis y varias pruebas (cistoscopia, radiografía de tórax, pielografía intravenosa, sigmoidoscopia) para determinar si el cáncer cervical se ha extendido a otras estructuras circundantes o a partes más distantes del cuerpo. Así mismo, pueden realizarse otras pruebas, como una tomografía computadorizada, una enema con papilla de bario y radiografías de huesos e hígado, dependiendo de las características de cada caso.

TRATAMIENTOS
El tratamiento depende del estadio en que se encuentre el cáncer. Si el cáncer está confinado a la capa más externa del cérvix (carcinoma in situ), a menudo se puede eliminar el cáncer por completo extrayendo parte del cérvix con un bisturí o mediante escisión electroquirúrgica. Este tratamiento tiene la ventaja de no alterar la capacidad de tener hijos. Pero ya que es posible que el cáncer recidive, los médicos aconsejan que las mujeres se realicen revisiones y Pap cada 3 meses durante el primer año y cada 6 meses a partir de este momento. Si una mujer tiene un carcinoma in situ y no desea tener hijos, es recomendable la extirpación del útero (histerectomía).

Si el cáncer está en un estadio más avanzado, es necesario realizar una histerectomía más una extracción de estructuras adyacentes (histerectomía radical) y de ganglios linfáticos. Los ovarios, si son normales y funcionan correctamente, no se extirpan cuando las mujeres son jóvenes. La radioterapia también es muy efectiva para el tratamiento del cáncer cervical avanzado que no se ha extendido más allá de la región pélvica. A pesar de que causa pocos o ningún problema inmediato, puede provocar irritación en el recto y la vagina. Las lesiones en la vejiga y el recto pueden producirse incluso tiempo después, y los ovarios, en general, dejan de funcionar.

Cuando el cáncer se ha extendido más allá de la pelvis, a veces se debe recurrir a la quimioterapia. Sin embargo, sólo es eficaz en el 25 al 30 por ciento de los casos tratados y los efectos habitualmente son temporales.
Enfermedades de transmisión sexual

Clamidia

La mayoría de las personas que tienen clamidia no lo saben porque esta enfermedad por lo general no provoca síntomas.
  • La clamidia es la enfermedad de transmisión sexual 
  • Las mujeres de 25 años de edad o menos que tienen relaciones sexuales necesitan hacerse pruebas anualmente para detectar esta enfermedad.
  • La clamidia es fácil de curar pero puede afectar la capacidad de tener hijos de las mujeres que no reciben tratamiento.
  •  Pero cuando sí se presentan, pueden aparecer como una sensación de ardor al orinar o una secreción anormal por la vagina o el pene.
    La clamidia puede provocar una infección urinaria tanto en hombres como en mujeres. En las mujeres, una infección en el sistema reproductivo puede conducir a una enfermedad inflamatoria pélvica, la cual puede conducir a infertilidad o problemas serios con el embarazo. Los niños que nacen de madres infectadas pueden tener infecciones oculares y neumonía por clamidia. En los hombres, la clamidia puede infectar el epidídimo, que es el conducto que lleva el esperma. Esto puede causar dolor, fiebre y, en raros casos, infertilidad.
  • La clamidia se diagnostica a través de análisis de laboratorio. El tratamiento consiste en antibióticos. El uso adecuado de preservativos de látex (condones) reduce en gran medida el riesgo de contraer o diseminar la infección aunque no elimina el riesgo totalmente. 
  • Gonorrea

  • La gonorrea es una enfermedad de transmisión sexual. Es más común en los adultos jóvenes. La bacteria que causa la gonorrea puede infectar el tracto genital, la boca o el ano. Puede contraerse a través del sexo vaginal, oral o anal con una pareja infectada. Una mujer embarazada puede transmitírsela a su bebé durante el parto.
    Algunas veces, la gonorrea no provoca síntomas. En los hombres, la gonorrea puede causar dolor al orinar y secreción proveniente del pene. De no tratarse, puede causar problemas en la próstata y testículos.
    En las mujeres, los primeros síntomas de gonorrea generalmente son leves. A medida que pasa el tiempo, puede provocar hemorragias entre los períodos menstruales, dolor al orinar y aumento de las secreciones vaginales. De no tratarse, puede provocar la enfermedad inflamatoria pélvica, que causa problemas en el embarazo e infertilidad.
    Su proveedor de cuidados de salud puede diagnosticar la gonorrea con exámenes de laboratorio. El tratamiento consiste en antibióticos. El tratamiento se está volviendo más difícil a raíz del aumento de cepas resistentes a los medicamentos. El uso correcto de preservativos de látex reduce enormemente, aunque no elimina, el riesgo de contraer y contagiar la gonorrea.
  • Papiloma humano

    Este virus es el responsable de las verrugas genitales y también ha sido la causa de algunos casos de cáncer cervical y de otros tipos de cáncer genital.
    Se desconoce qué es lo que produce este virus. El papiloma humano produce las verrugas genitales que son altamente contagiosas.
    Síntomas
    A unos tres meses de que una persona haya sido expuesta al virus, las verrugas aparecerán en el lugar en que hubo contacto con la persona infectada. Pueden aparecer varias verrugas al igual que una sola. Si no se tratan, ellas formarán un tejido carnoso con aspecto coliflor. En algunos casos las verrugas desaparecen, pero la persona continuará infectada.
    Tratamiento
    No existe cura para las verrugas genitales, ya que una vez se haya contraído el virus este permanece en el cuerpo. Las verrugas pueden ser extirpadas químicamente, por congelamiento, quemándolas, quirúrgicamente, en los casos de verrugas más grandes o por medio de rayos láser. Aunque estas se extirpen, las verrugas pueden reaparecer y siempre son contagiosas.

    Herpes genital
    El herpes genital no pone en riesgo su vida, aunque puede ser bastante severo en personas que tienen sistemas inmunológicos deficientes.
    Causa
    Existen dos clases de virus del herpes simple. Cuando se presentan llagas en los labios o ampollas causadas por la fiebre, se deben al virus del herpes simple I. El virus del herpes simple II por lo general produce llagas en el área genital, pero también pueden salir en los labios y boca. Se contagia a través del contacto sexual con alguien que tenga llagas genitales visibles.
    Síntomas
    Ampollas pequeñas y muy dolorosas que se pueden encontrar alrededor de la vagina, en el pene, alrededor del ano, los muslos y los glúteos. Estas ampollas pueden reventarse y secarse formando costras.
    Tratamiento
    No existe cura disponible. La duración de los síntomas puede reducirse si se da tratamiento en la etapa inicial del brote. Si no se inicia temprano, puede que el tratamiento no sea efectivo.

    Tricomoniasis
    Es causada por el parásito trichomona vaginalis, cuya incubación es de días a semanas.
    En la mujer
    Produce flujo vaginal maloliente, espumoso, de color verde-amarillento, que se acompaña de molestias para orinar.
    Ardor y escozor vaginal.
    En el hombre
    Secreción de color blanco, aguanoso, que sale del pene.
    Dolor o ardor al orinar
    Tratamientos
    Metronidazol, 2 g vía oral como dosis única.
    Metronidazol, 500 mg vía oral 2 veces al día por 7 días.

    SIDA.
    El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) es responsable del síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA) y ataca a los linfocitos T-4 que forman parte fundamental del sistema inmunológico del hombre.
    Como consecuencia disminuye la capacidad de respuesta del organismo para hacer frente a infecciones oportunistas originadas por virus, bacteriasprotozooshongos y otro tipo de infecciones.
    La causa más frecuente de muerte entre enfermos del SIDA es la neumonía por Pneumocystis carinii, aunque también es elevada la incidencia de ciertos tipos de cáncer como los linfomas de células B y el sarcoma de Kaposi. También son características las complicaciones neurológicas, la pérdida de peso y el deterioro físico del paciente.
    El VIH se puede transmitir por vía sexual, a través del contacto con sangretejidos o agujas contaminadas y de la madre al niño durante el embarazo o lactancia. Tras la infección, los síntomas del SIDA pueden tardar incluso más de 10 años en manifestarse.
    Haemophilus ducreyi - Chancro
    El chancro es una enfermedad ulcerosa genital causada por la bacteria Haemophilus ducreyi.
    Biozell Diagnóstico Molecular ofrece la prueba de detección de H. ducreyi mediante la técnica de PCR que amplifica secuencias específicas de su ADN genómico. Este método es más sensible y más rápido que el cultivo del microorganismo. Así mismo Biozell ofrece la posibilidad de detección simultánea de los tres agentes responsables de la formación de úlceras genitales sobre una única muestra tomada de la lesión.

    Sífilis
    Causa
    Es una enfermedad de transmisión sexual ocasionada por la bacteria Treponema pallidum. Esta bacteria necesita un ambiente tibio y húmedo para sobrevivir, por ejemplo, en las membranas mucosas de los genitales, la boca y el ano. Se transmite cuando se entra en contacto con las heridas abiertas de una persona con sífilis. Esta enfermedad tiene varias etapas, la primaria, secundaria o principios de la latente. En la etapa secundaria, es posible contagiarse al tocar la piel de alguien que tiene una erupción en la piel causada por la sífilis. Esta no se contagia al tocar el asiento del baño o una toalla que ha sido usada por la persona infectada.
    Síntomas
    Existen cuatro etapas por la cual puede atravesar la enfermedad si no es tratada a tiempo.
    Etapa primaria: El primer síntoma es una llaga (chancro) en la parte del cuerpo que entró en contacto con la bacteria. Estos síntomas son difíciles de detectar porque por lo general no causan dolor y, en ocasiones, ocurren en el interior del cuerpo. Una persona que no ha sido tratada puede infectar a otras durante esta etapa.
    Etapa secundaria: Surge alrededor de tres a seis semanas después de que aparece la llaga. Aparecerá una erupción en todo el cuerpo, en las palmas de las manos, en las plantas de los pies o en alguna otra zona. Otros síntomas que se pueden sentir son fiebre leve, inflamación de los ganglios linfáticos y pérdida del cabello.
    Etapa latente: La sífilis, si no es diagnosticada ni tratada durante mucho tiempo, entra en una etapa latente. En esta etapa no hay síntomas notables y la persona no infectada no puede contagiar a otros. Sin embargo, una tercera parte de las personas que están en esta etapa empeoran y pasan a la etapa terciaria de la sífilis.
    Etapa terciaria (tardía): Esta etapa puede causar serios problemas como trastornos mentales, ceguera, anomalías cardíacas y trastornos neurológicos. En esta etapa, la persona infectada ya no puede transmitir la bacteria a otras personas, pero continúa en un periodo indefinido de deterioro hasta llegar a la muerte.
    Tratamiento
    Para un tratamiento rápido se receta la penicilina inyectada. Veinticuatro horas luego de la inyección la persona ya no puede transmitir el virus. Este tratamiento es efectivo en todas las etapas.